Pasar una tarde en fin de semana divertido con amigos, no tiene que ir relacionado siempre con bebidas alcohólicas. Seguramente después de beber como si no hubiera mañana tienes la necesitad de tomar agua, comer todo el tiempo en especial algo dulce y más. Si ya no quieres pasarla mal, deja de tomar y disfruta.
Esto le pasa a tu cuerpo cuando decides dejar la copita:
Desarrolla músculos
Según el sitio de fitness para hombres, el alcohol disminuye la rapidez con la que ves los resultados del gym, por que los evita y hace más lento.
Así que ponte a hacer burpees como loco para marcarte.
Aumenta tu hidratación
Beber alcohol en exceso provoca la eliminación de agua y sodio, lo que se ve reflejado con ganas de orinar, eliminar líquidos del cuerpo y esto causa la deshidratación.
Tienes piel más sana
El alcohol es un diurético y al dejar de consumirlo la piel suele verse y sentirse más hidratada y sana.
Mejoras a la hora de cooperar
Cuando traes alcohol encima, aumenta la confianza cuando estás con otra persona. Pero también, sensibiliza las terminaciones nerviosas, lo cual es muy importante para la excitación. ¡Aplícate!
Bajas de peso
Las bebidas alcohólicas tienen muchas calorías. Según American Journal of Epidemology, el alcohol aun en consumo moderado añade hasta 400 calorías en tu dieta. ¡Calorías líquidas!
Duermes mejor
Aunque muchos piensen que tomar puede relajarte un poco y te permite dormir más rápido, no están mal. Pero ya dormidos, causa falta de concentración y “no se duerme bien”.
fuente: moi
