Mejora las defensas
Se producen más endorfinas y, por ende, la sensación de felicidad aumenta, ya que son sustancias que combaten naturalmente la depresión. Además, éstas mejoran el sistema inmunológico y, así, se es menos propenso a padecer una enfermedad.
Disminuye los niveles de estrés
El sentirse enamorada o enamorado también fomenta que el cortisol, hormona que aumenta la tensión arterial, disminuya en el cuerpo. Eso provoca una emoción placentera.
Merma el riesgo de enfermedades cardiovasculares
Literalmente, el amor es bueno para el corazón, pues se incrementa la producción de dopamina, oxitocina y norepirefrina, que ayudan a fortalecer el funcionamiento de este órgano vital.
Da vitalidad
La melatonina también se libera al estar enamorados y, gracias a ello, el autoestima aumenta y hay mucho más energía en el cuerpo.
Aumenta la belleza
La piel, las uñas y el cabello lucen mejor, gracias a la generación de más estrogeno en el cuerpo.
Mejora la salud
Según la ciencia, el amor beneficia a la salud, no solo en la primera etapa del enamoramiento, sino también cuando ya se tiene una relación estable.