Finalmente la Sala Regional Monterrey declaró la nulidad de la elección del ayuntamiento de Querétaro, en este caso, al demostrarse que el presidente municipal interino Enrique Correa Sada violento el principio de equidad en la contienda, al difundir actos de campaña del presidente municipal que en vía de reelección competía para el cargo, dejando con ello de salvaguardar el principio constitucional de neutralidad, que impone a los funcionarios de todos los niveles de gobierno abstenerse de influir en el proceso electoral.