(Reuters) – México y Estados Unidos están trabajando en un plan para procesar a los migrantes en el sur de México, que incluye a cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos, dijo el miércoles la canciller entrante de México, Alicia Bárcena.
Bárcena no detalló el plan, pero dijo que complementaría las opciones existentes para que los inmigrantes ingresen a los EE. UU.: un programa de visas humanitarias para esos grupos y una aplicación móvil para solicitantes de asilo llamada CBP One.
Dijo que México estaba buscando establecer un “espacio internacional” que ofreciera “múltiples servicios” para los migrantes de los cuatro países que permanecieron en México después de que terminaron las restricciones de la era COVID en la frontera sur de Estados Unidos en mayo.
“El presidente López Obrador nos ha dicho que lo hagamos en el sur de México para evitar este triste tránsito hacia Estados Unidos”, dijo Bárcena a periodistas tras las reuniones esta semana entre funcionarios estadounidenses y mexicanos sobre migración y seguridad.
Dijo que el plan tenía como objetivo abarcar tanto el asilo como el empleo, y agregó que México quiere explorar vías seguras y ordenadas para las personas que no son elegibles según las reglas actuales.
Cuando se le preguntó sobre los comentarios de Bárcena, un funcionario mexicano dijo a Reuters que las conversaciones aún estaban en curso con EE. UU. El plan no preveía el uso de instalaciones estadounidenses, agregó el funcionario.
Reuters informó este mes que funcionarios estadounidenses y mexicanos estaban discutiendo un nuevo programa de refugiados estadounidense para algunos solicitantes de asilo no mexicanos que esperan en México, como parte de los intentos del presidente estadounidense Joe Biden de crear más vías legales para la migración.
Permitiría que los inmigrantes calificados aprobados para el estatus de refugiado ingresen a través del programa de reasentamiento de refugiados de EE. UU., que solo está disponible para solicitantes en el extranjero, dijeron fuentes a Reuters.
A diferencia de la mayoría de los inmigrantes que solicitan asilo después de ingresar a los EE. UU., los refugiados reciben una autorización de trabajo inmediata y beneficios gubernamentales, como asistencia para la vivienda y el empleo.
Bárcena dijo que la cantidad de migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México disminuyó más del 50% en mayo y junio después de que expiraron las restricciones fronterizas de la era COVID, conocidas como Título 42.
