Todos los grandes artistas suelen tener un cierto grado de excentricidad y Luis Miguel no es la excepción, hay ciertas cosas que hace y que pide que se hagan antes de que salga al escenario, a dar una entrevista o simplemente a la calle.
“Él es perfeccionista, incluso para cada concierto estrena zapatos italianos hechos a su medida, yo creo que se siente cómodo, ya los usó, ya los sudó y los que siguen, no sé si los tiraban o qué hacía con ellos pero siempre estrenaba”, compartió Rosario Valeriano quien fue su jefa de prensa en la década de los 90.
En 2008 la revista argentina “Gente” publicó algunos de los secretos de “El Sol”, entre ellos el uso sin restricciones de las costosas cremas La Mer, cuyos costos van de los mil 900 a los 13 mil pesos aproximadamente; dato nada descabellado si se toma en cuenta que Luis Miguel es un hombre preocupado por su imagen.
“Es un tipo impecable, los maquillistas me decían ‘tiene el cutis perfecto’, no le veías en los ojos ni una venita roja, como todos los tenemos, siempre olía rico y su ropa perfecta, porque tiene mucho respeto a su carrera”, explicó Valeriano.
La publirrelacionista comentó que es su obsesión el escucharse a la perfección durante sus conciertos, es por eso que todo el tiempo le está dando instrucciones a sus músicos e ingenieros de sonido a través de señales, que las fans identifican perfecto.
Para muestra está un concierto realizado en la ciudad de Buenos Aires, en octubre de 2014, donde el volumen del sonido hizo que su micrófono hiciera interferencia y dejó de cantar como una forma de no dejar pasar ese detalle. Este año en su tercer concierto en el Auditorio Nacional de su gira “¡México por siempre!” Volvió a parar el show por problemas con el audio y regañó a su staff en pleno escenario.
En la misma publicación se cuenta que el cantante manda a gente de su equipo a fotografiar a las chicas de las primeras filas, de este modo él elige a la más guapa para invitarla al final de concierto a tomar una copa a su suite; también se hablar de su obsesiva preferencia por relojes Cartier y Rolex.