Luis Inácio ‘Lula’ Da Silva, el polémico expresidente de Brasil, fue recibido por el papa Francisco en el Vaticano. Ambos sostuvieron una reunión privada en el despacho del pontífice.
“La avaricia de los intereses comerciales y financieros es responsable de revocar los logros de los trabajadores y el aumento de la desigualdad en el mundo”, dijo Da Silva al salir de la reunión, según se publicó en su portal en internet.
El diario Folha de Sao Paulo informó que la reunión fue pedida por el presidente de Argentina, Alberto Fernández. El Papa y el presidente argentino se reunieron en días pasados.
LULA PIDIÓ PERMISO A TRIBUNAL
El exmandatario brasileño solicitó a la Justicia Federal del Distrito Federal reprogramar la fecha de una comparecencia que tenía prevista para el martes, 11 de febrero, en la que ofrecería un testimonio sobre la operación Zelotes.
La Folha de Sao Paulo informó además que “el juez Ricardo Augusto Soares Leite lo autorizó y la audiencia fue reprogramada para el 19 de febrero”. El regreso de Lula a Brasil está pautado para el domingo 15.
Da Silva fustigó a los gobiernos del mundo con respecto a las posturas sobre el cambio climático. “Mientras la gasolina y el petróleo sean baratos, no hay interés en cambiar la matriz energética de la mayoría de los países”. Instó a “tomar muy en serio un nuevo modelo de producción de energía”.
LA VIEJA AMISTAD DEL PAPA CON LULA
Cuando Lula ingresó a la prisión, condenado por corrupción y lavado de dinero, el papa Francisco le respondió con una carta en la que le expresó solidaridad “con las duras pruebas que has vivido últimamente”. Lula le había escrito cuando vivía el proceso penal.
El diario paulista recordó la lista de procesos que enfrentó Lula. “Fue condenado por corrupción y lavado de dinero por el caso del triplex Guarujá (…). También fue condenado por el caso del sitio Atibaia y tiene otras seis demandas pendientes tanto en las cortes de Paraná como en el Distrito Federal y Sao Paulo”, informaron.
fuente: forbes